jueves, 16 de diciembre de 2010

El tiempo y los amantes.

La percepción del tiempo es relativa,
o se escapa y se escurre como agua entre los dedos
o es eterna como la peor de las torturas;
por eso caminamos, bebimos,
dejamos a las burbujas
hacer estragos en el cuerpo,
perdiendo la conciencia
y la potestad de movimiento,
liberando sensaciones y emociones,
dejando a la piel y al espíritu ser libres
de sonrojarse,
de transpirarse,
de desearse,
de tenerse,
de apretarse,
porque sabíamos que estábamos
en tiempo de descuento.
Pero, para no ser crueles con el tiempo
y volverlo protagonista indeseado de la historia
podría decir también
que encuentra su mejor momento
en la manifestación del amor,
es ahí donde ampara y contiene
su mejor escena
y se compra todas las garantías
de ser por siempre recuerdo,
porque para los amantes
que en su amor se aman
no existe nada mejor que
un tiempo para recordar,
una imagen detenida
aunque ya a destiempo,
un reflejo perpetuo 
que no se desdibuje jamás.

Destino final: Olvido.

Estoy comenzando a convencerme
de que lo que en un principio
podría haberse entendido como un encuentro
simplemente casual fue en cambio una treta
– o por qué no una tregua- de la vida
que sin pedírselo me viene demostrando
que hará conmigo lo que ella quiera
aunque eso signifique invadirme
la cabeza de momentos
que luego tendrán como destino el olvido.
Le doy una calada, la última tal vez,
al cigarrillo número diez del día,
como si paso a paso,
aspirando el humo y
dejándolo entrar a mis pulmones
pudiera anestesiar este mar de emociones
que me transpiran en la piel poro por poro.
Estar en el número diez significa
que hay un poco de retardo en el efecto.
Así, en la plena conciencia
de que no vas a abandonar mi recuerdo mañana
ni tampoco pasado ni el viernes ni el fin de semana,
te dejo respirar en mi hombro,
hablar en mi oído y
besarme la boca,
como si este resabio invisible de vos
fuera lo último que puedo conservar
hasta que por fin seas como esa ola
que  una vez que te ha tocado los pies
vuelve a mezclarse con el mar
para no ser nunca más ella misma,
para desaparecer,
como si no hubiera sido nada.

lunes, 8 de noviembre de 2010

viernes, 22 de octubre de 2010

Lejos.

Hoy te escribo desde el mar, desde una tierra lejana a mi patria.
Te escribo desde una ciudad donde el sol no quiere salir,
donde las personas no entienden mi lunfardo
y donde los taxis desconocen el negro y amarillo.
Te escribo desde las ausencias de todo lo conocido,
de todo eso que nos hace sentir en casa.
Te escribo porque necesito traerte conmigo,
necesito tener la seguridad de que la vida,
o mejor dicho, mi vida, pasa por otro lado,
lejos de esta ficción donde no puedo ser
porque nada de lo me rodea me pertenece.

martes, 31 de agosto de 2010

Espíritu

Se puede respirar vida detrás de la puerta invisible de las cosas 
y encontrar los sentidos que significan y re significan 
al humano que las cosas esconden. 

* Para la Pi que buscaba algo de esperanza debajo de las piedras de cemento

lunes, 30 de agosto de 2010

Concreto

Casas, bancos, edificios, peluquerías, 
tiendas de ropa, bares, hoteles…
Cemento, concreto, todo cuadrado, todo recto.
Adentro dicen que habita humanidad, 
pero cuando miro, no veo más que 
cemento, concreto, todo cuadrado, todo recto.

lunes, 16 de agosto de 2010

Reloj (historia verídica)

Hubo una época en la que podíamos hacer parar el reloj y las horas no pasaban. También hubo otra época en donde parecía que lo acelerábamos y se iba casi sin darnos cuenta.
Hoy no sabemos si es mejor que las horas vuelen o que el tiempo se detenga. Por eso, una noche cualquiera antes de la cena cuando vimos al señor del tiempo girar al revés, lejos de urgentemente ponerlo a marchar como debiera, nos matamos de la risa y lo dejamos seguir así, evadiendo el dictamen normal de ir siempre para la derecha.
Es que comprendimos que cuando las horas parecían detenerse era bueno y que cuando el tiempo se nos escapaba de las manos también era bueno, pero ahora que marcha al revés, entendemos que los momentos además de ser buenos pueden también ser mágicos.
Nos encanta pasar en frente y asegurarnos de que sigue marchando al revés, como si quisiera decirnos algo. Nos gusta su rebeldía en medio de tanta normalidad. Disfrutamos verlo atrasar con la idea absurda de que el tiempo no se consume hacia delante. Es que nos evoca una sensación de eternidad por la cual después de hoy puede mágicamente venir ayer y no mañana.

Tímido

Le pasó por el mismo costado 6 veces,
nunca se animó a mirarla.
¡Valentía! Le dijo un amigo,
y él salió a ver dónde podía comprarla.

lunes, 2 de agosto de 2010

Sueños

Los sueños mantienen viva la esperanza de las cosas que aún no tenemos pero que sabemos quedan por venir. Si nos quedamos sin sueños, si ya no añoramos una quimera entonces estaremos vacíos de esperanza, estaremos perdidos y sumergidos en la realidad palpable de lo que simplemente existe y es en este momento presente.
Hay que renovarse, hay que soñar más y más, siempre y en cada momento, hay que darle rienda suelta a la imaginación, dejar que broten los deseos y que se esparzan por el aire para que algún artilugio del destino los haga posible.

martes, 27 de julio de 2010

Mujeres

Mujeres fuertes de acero y cemento o frágiles de papel y tiza
que lucen bien tanto en una pollera como en un pantalón
que se les da bien hacer un presupuesto o un huevo frito
que dan consejos y prestan la oreja
que buscan la oferta y que por supuesto demandan.
Las hay de todos los tipos, con forma de pera y guitarra
flaquitas, sumisas, gorditas, dóciles y descocadas.
Todas y cada buscan el corazón que quiera abrazarlas
todas y cada una esperan al príncipe azul
que sin desteñir las quiera en su cama.

Solamente

Cuando me siento el blanco perfecto de todas las broncas de Dios,
cuando me encuentro sin tregua, sin asideros, sin causa,
solamente pienso en ese espacio,
en ese hueco pequeño en tu pecho.
Y ya no quiero el elixir de la felicidad,
ni una casa de cemento,
ni una vida 5 estrellas,
ni el teléfono de un gurú
Solamente quiero que me dejes un lugar ahí
donde el amor lo es todo
y donde todo lo demás
se vuelve nada.

jueves, 22 de julio de 2010

Recuerdos

Momentos como postales, o como heridas,
para bien o para mal,
con una canción,
un poema,
un aroma,
un lugar,
los recuerdos siempre vuelven,
como si no conocieran el olvido.

sábado, 10 de julio de 2010

La edad

Qué cuántos años tengo?...
los que gritan mis arrugas,
los que delata mi celulitis,
los que aparentan mis canas,
pero en realidad los que mejor sé llevar
son los que dicta mi espíritu.

jueves, 8 de julio de 2010

Siglo XXI

Juan:
Se levantó de la cama con mucho esfuerzo,
fue al baño, se lavó la cara, los dientes
y después limpió el espejo salpicado de dentífrico

Marcos:
Se levantó de la cama casi sin esfuerzo,
fue a la cocina y puso la pava con agua,
después entró al baño y limpió el espejo salpicado de dentífrico

Juan:
Se puso una bermuda a rayas y una camiseta azul
fue a la cocina, abrió la heladera
y comió una porción de pizza de la noche anterior

Marcos:
Se cambió, hizo la cama y abrió las ventanas,
fue a la cocina, preparó el mate y tostadas,
prendió la radio y escuchó el informe del tiempo

Juan:
Juntó la ropa sucia del canasto
la llevó hasta la lavadora y la puso a andar
fue hasta la cocina y prendió el televisor

Marcos:
Tomó un paraguas y un abrigo de cuero,
se acercó a Juan, le dio un beso en la frente,
y le dijo que llegaría a las 9, que preparara la cena.

miércoles, 7 de julio de 2010

La Muerte y su inminencia

La muerte y su inminencia, esa sensación de que va a llegar en cualquier momento retumba como un sonido molesto en nuestras cabezas y nuestro corazón.
Me toco el pecho y siento que late, cierro los ojos, suspiro y tengo la gratitud de poder respirar.
El miedo siempre latente camina con nosotros al supermercado, a una fiesta, a la almohada antes de ir a dormir.
La sensación asfixiante de pensar que quizá nunca despertemos del viaje onírico y nos sumerjamos en un sueño eterno.
La muerte toma entidad desde el día uno de nuestra existencia, nos convierte en seres mínimos de polvo que al polvo volveremos, por más esfuerzo, por más lucha, por más intentos fracasados que podamos realizar para ganarle la partida.
Nacemos con esfuerzo y con dolor, probablemente tengamos mejor suerte a la hora de partir y muramos sin esfuerzo y sin dolor, pero, tan insignificantes y pequeños somos sobre tamaña fatalidad que no podremos elegir ni el cómo.
Nadie decide cuándo nacer, nadie decide cuándo ni cómo morir, suerte la nuestra que tenemos todo lo del medio para decidir hasta el cansancio y a veces ni siquiera eso nos gusta.

viernes, 2 de julio de 2010

Alados

Me dijo: estoy volando,
me pregunté… ¿Cómo podría?,
así desee inmensamente tener alas.
Cuando las sentí moviéndose en mi espalda
me impulsé hasta el cielo y emprendí mi viaje,
hermoso fue encontrarte en la esquina de una nube.

viernes, 18 de junio de 2010

Metamorfosis


El extraño deja de serlo, se apodera del cuerpo y de la mente
comienza a tener potestad y comenzás a mutar
El cambio cuesta, se te quiebran los huesos, se te retuercen las vísceras
Tenés miedo, te duele, te asustás de vos y te asustás del mundo
Te esforzás un poco y luchás con fuerza, te resistís.
Pero ya está, es tarde, la metamorfosis está hecha.

lunes, 14 de junio de 2010

Quiero

Quiero verme en una foto de pequeña
cuando el brillo en los ojos era como un haz de luz
cuando hubiéramos compartido sin problemas la rayuela
y el mayor de los disgustos hubiera sido no llegar al cielo

Quiero verme en un subibaja impulsando las piernas
dejándolas libres cuando me ayudes a subir
y que el mayor de los disgustos sea
mi falta de fuerza para hacerte llegar más alto

Quiero verme en ese banco frente al río
con la incertidumbre y la fantasía del amor nuevo
de las almas encontradas en medio del dolor
y que el mayor de los disgustos sea
mirarnos y encontrarnos como estamos

Quiero verme en esa casa que soñamos,
en esa cama que inventamos,
en el medio de tus deseos y los míos
para que el mayor de los disgustos sea:
Amor, no tenemos chocolate en la heladera.

miércoles, 9 de junio de 2010

Contener y contenerse

Un dormido deseo de salir corriendo,
un control permanente sobre la mente y el cuerpo.
Contener y con astucia contenerse,
evitando las catástrofes de las que ya no se vuelve.
Miedo absurdo y verdadero me hace presa de este infierno,
y el amor que reivindica se escabulle en recovecos.
No me esperes esta noche de enfado y desenfreno,
yo a solas con mi espanto estando lejos te protejo.

lunes, 7 de junio de 2010

Rutina

Apagar la luz, reposar la cabeza sobre la almohada y cerrar los ojos.
Soñar infinitas aventuras que solamente pueden existir en el mundo onírico, encerrar pesadillas en una bóveda y tirar la llave.
Despertar con el primer rayo de luz que filtra la persiana a medio cerrar.
Respirar profundo para acumular energía suficiente porque el día será largo, apoyar primero el pie derecho y sonreír.
Preparar un mate caliente, largo y rico, untar una tostada con un poco de optimismo y saborearla hasta el final.
Arrancar el día con la certeza de que va a repetirse igual mañana y pasado y pasado o arrancar el día pensando que puede ser el más importante de tu vida.
Y así salir de la rutina y entrar en el mágico encanto de la vida cuando se mueve, de la vida cuando en ella suceden cosas impensadas, de la vida cuando se manifiesta en todo su esplendor, de la vida cuando busca una metáfora para mostrarnos que estamos vivos por una razón más grande que soñar de noche, creer en cábalas y tomar mate.

Goodbye

No me digas que no puedes encontrar el sueño en esa almohada de seda
Ni me cuentes sobre el insomnio que te obliga a conseguir compañía en el café
No quiero enterarme de tus luchas internas que te golpean la frente a derecha y revés
Si yo fuera una mosca chiquita, entraría por la ventana a mirar
Es que tengo un espíritu espía que moriría por verte pensar
Si tanto te duele mi ausencia, pues debiera dolerte mil veces más
Es que te dije maldito canalla que el día que parta no volvería jamás.

Agujeros oscuros.

Las voces, todas, gritando dentro sin dejar pensar.
Un ángel y un demonio invisible,
un ser entero odiando y amando a la vez.
Los agujeros oscuros son oscuros en serio,
no hay forma de advertirlos,
solamente cuando ya estás adentro.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Cortázar y una tostadora

Estamos conectadas por una tostadora y un libro de Cortázar. A mí me siguen asustando las tostadas cuando saltan aún cuando sé de antemano que van a saltar, me asustan y 3 segundos después me da una gracia casi absurda. Vos resucitás la tostadora como si volver a poner el pan a tostar fuera una manera de decir que has superado una etapa de la vida. Todo esto sucede en locaciones diferentes, pero mágicamente en simultáneo.
Llegó a mis manos otra vez un libro de Cortázar que ya supe perder en otras vidas. Este libro que a mí me evoca un tiempo de adolescencia ya perdido, y que a vos te evoca algún posible cambio de un destino que ya se pronunció. Todo esto sucede en locaciones diferentes, pero mágicamente en simultáneo.
Y tal cual La Maga y Oliveira cuando jugando a desencontrarse se encontraban, nosotras por algún misterio nos encontramos en las trivialidades de una tostadora y de un libro de Cortázar.
Sonrío con gratitud, con la felicidad de saber que algunas personas estamos conectadas, más allá de cualquier realidad palpable, evidenciando una ficción que parecería inventada pero que es real.
¡Cortázar y una tostadora!. En dos lugares diferentes pero en simultáneo. Ya lo dije hace unos días, el suelo contiene aunque nadie lo sepa, el suelo contiene aunque nadie se siente conmigo hoy y la mística de algunas almas que supieron encontrarse en este mundo pueden simplemente conectarse por dos cosas tan triviales como una tostadora y un libro de Cortázar.

jueves, 15 de abril de 2010

Lluvia

Quiero ver llover hasta que el cielo se canse, hasta que la calle quede vacía de gente, de voces.
Quiero ver llover porque me parece tristemente bello ver todas esas gotas suicidas.
Quiero ver llover porque el agua limpia el paisaje como el perdón limpia la culpa.

Julia.


Julia solamente fuma cuando está conmigo, las últimas 2 veces que la vi no tenía cigarrillos en su cartera. Ella fuma conmigo como evocando algún momento pasado, como queriendo traer al presente toda esa nostalgia de botas altas, polleras cortas y pantalones a cuadro con campera roja.
Julia es la misma en su forma externa y es la misma también en el modo de dibujar historias en una hoja en blanco, pero sus ojos, esos grandes ojos negros no son los mismos.
Julia sabe que ha cambiado, yo lo sé también. Hay un viento de tristeza que se le filtra en su mirada y yo, testigo distante desde hace un tiempo, no dejo de preguntarme cuándo se irá.
Julia, que no es Julia literalmente pero que lo ha sido en varios artilugios, erratas y falacias de conocidos y de perfectos desconocidos, también será siempre un alma compañera, la dueña exclusiva de un tiempo que no pudo ser mejor. Es y siempre será la amiga encontrada en el camino por bendita causalidad.
Julia sabe como ser feliz pero hoy no quiere y ayer tampoco quiso, quién sabe mañana si querrá. Yo por lo pronto trato de estar cerca como en cada paso, aunque medien kilómetros y kilómetros de cinta asfáltica, porque cuando ella quiera, yo quiero ver el destello de sus grandes ojos negros.
Julia espera por alguien, alguien espera por Julia, juntos tendrán una historia maravillosa y ya nadie se acordará de la imagen de ficción de la casa oscura con un cigarrillo, un te amargo y dos o tres gatos.
Cuando Julia decida volver a brillar, ahí estaré, feliz de poder contemplarlo.

martes, 23 de marzo de 2010

25 Años


Un cuarto de siglo, dos décadas y media, o simplemente 25 años. Lo puedo decir de mil maneras y va a sonar siempre igual: tiempo consumido.
Pasaron muchas cosas, buenas, muy buenas, malas y muy malas, pero acá estoy sosteniendo el cuerpo y alimentando el alma, entre mi blog y un mate amargo.
Voy con las ansias de comerme un siglo entero y como dije al comienzo ya tengo un cuarto adentro. Habrán cosas buenas, muy buenas, malas y muy malas, pero ahí estaré siempre, sosteniendo el cuerpo (como pueda) y alimentando el alma, probablemente entre una teletransportación y un mate biónico.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Libre Pensamiento


Alcanza con mirar una tarde desde el balcón hacia la calle para darse cuenta la cantidad de mundos que conviven en un solo mundo. Miles de personas diferentes, extrañas entre sí, se encuentran y se desencuentran entre calle y calle.
Qué fantástico sería todo si los pensamientos de esas y todas las personas tuvieran voz, si pudieran salir hacia afuera con independencia del control que sobre esos pensamientos se pudiera tener.
No sería como hablar simplemente, porque podemos controlar qué decir y qué callar, pero ¿cuántas veces pudimos controlar qué pensar?.
Los pensamientos se nos escapan, nos desafían, nos torturan y a veces también nos duelen. Pero son más sinceros que las palabras porque no se filtran, no pasan por el catalizador mental que nos dice: no tenés que decir esto.
Pensar es un don divino y hablar es simplemente una distorsión humana.
Y alcanzaría con mirar una tarde desde el balcón hacia la calle y sentir la revolución, miles de almas sacando todo afuera con una involuntaria pero gratificante honestidad: el almacenero de la esquina sería públicamente el tonto de la cuadra, la mujer de anteojos de sol sería perfectamente conocida como la Sra. que desea al marido de la otra, la otra lo sabría y entonces la Sra. de los anteojos de sol sería la descocada del barrio.
Pensar, sería la locación y no la foto, sería la persona y no el reflejo en el espejo. Sería más desgarrador, pero menos mentiroso. Entonces ¿pienso lo que digo?....No, mejor digo lo que pienso.

Newton


Por cada acción hay una reacción equivalente y opuesta” decía Newton pensando que solamente hablaba de física.
Cada cosa que se hace o se dice tiene en su justa medida una consecuencia. No podemos borrar y sobrescribir, no podemos permitirnos ser incoherentes, no podemos construir depositando la mugre debajo de la alfombra.
No podemos estar repartiendo entre amigos versiones de nosotros mismos enfocadas en todo eso que no pudimos ser.
Perdemos la cuenta de todas las almas que engañadas nos enaltecen y hasta envidian por esa sortija que parece de diamantes pero que de cerca delata su origen de feria.